Sin rastro del joven Lennon
Para disfrutar de ´Nowhere Boy´, recientemente estrenada en España y hace dos años en el resto del mundo civilizado, el espectador puede olvidar que su protagonista -ese chaval con pintas de inocente, tupé a lo Elvis y que sueña con convertirse en estrella del rock- es John Lennon. Poco hay en este largometraje del adolescente turbulento y problemático que acabaría liderando el grupo de música más popular del siglo XX. El filme describe su peculiar historia familiar: con cinco años, el pequeño John tuvo que marcharse a vivir con su victoriana tía Mimi, porque su padre se había largado a Nueva Zelanda y su madre no podía hacerse cargo de él. Pero el Lennon adolescente que nos quieren vender aquí no se parece mucho al que describen la mayoría de crónicas de aquellos años previos a los Beatles.
La ópera prima de Sam Taylor-Wood pretende profundizar en estos años mozos, tal vez para explicar los condicionantes biográficos del autor de ´Strawberry Fields Forever´, ´I am the walrus´ y ´Mother´. El resultado, sin embargo, parece una versión completamente edulcorada de ese chaval que se pasaba el día soltando tacos, abusando de los débiles y peleando hasta con su sombra. Poco o nada hay aquí del Lennon rebelde, cruel, bebedor y violento que describe, por ejemplo, la única biografía oficial de la banda de Liverpool, firmada por Hunter Davies y publicada en 1968.
No todo en ´Nowhere Boy´ es desechable. El film tiene alguna interpretación brillante (la siempre resolutiva Kristin Scott Thomas como la tía Mimi), una interesante dirección artística y una historia familiar razonablemente bien expuesta (dos hermanas que luchan por el amor de un chaval; sobrino de una que lo ha criado, hijo de otra que ha formado otra familia). Pero no se engañen. Conviene insistir en que el argumento esconde el lado oscuro del genio.
´Getting Better´: "Solía ser cruel con mi mujer / La golpeaba y la apartaba de las cosas que amaba". Lennon se reconoció en la letra de esa canción, incluida en el legendario Sgt. Pepper´s, y admitió que se arrepentía de ciertas actitudes de su pasado. Al fin y al cabo, ser una de las personas más célebres e influyentes del siglo XX no conlleva una biografía impecable. En una entrevista concedida a Rolling Stone en 1970, Lennon confesó que con doce años solía preguntarse si era un genio o simplemente estaba loco. Un poco de las dos cosas, probablemente. En ´Nowhere Boy´ nos muestran un genio desalmado, sin atisbos de locura. Una oportunidad perdida.
http://www.farodevigo.es/sociedad-cultu ... 56793.html